viernes, mayo 04, 2007

Educación sexual

Rev. José Eugenio Hoyos
Washington Hispanic
4 de mayo de 2007


Es cierto que el mundo actual ha avanzado y evolucionado muy rápido. La tecnología se ha apoderado de la educación en el mundo. En algunas escuelas, colegios, y universidades, el maestro pasó a un segundo plano, pues la computadora ocupa el lugar de privilegio. Anteriormente, el profesor cuidadosamente enseñaba ciertas materias con cierto miedo o temor para no ofender al estudiante o a los padres de familia. Por ejemplo, se hablaba poco del tema del sexo, pues era considerado un tabú.


Ahora, increíblemente los niños desde los 7 años saben todo sobre la sexualidad. Cuando el maestro quiere explicar algo del sexo, los alumnos están mejor informados y con mayor experiencia. Si es parte de la educación y de edificación de la persona y se hace con responsabilidad, no le veo ningún problema, todo lo contrario.


Pero cuando se enseña la sexualidad en forma desorientada y dirigida al libertinaje entramos en un gran problema que nos dará consecuencias graves como embarazos indeseables en niñas adolescentes de 13 a 17 años, etc.


"¡Tuve sexo mil veces pero nunca hice el amor!", dice el compositor guatemalteco Ricardo Arjona en su canción "La Primera Vez". Es fácil tener sexo y es difícil amar; es fácil acostarse con alguien, pero exige madurez convivir con alguien.


Un estudio hecho en América Latina por el Centro Latinoamericano de Investigaciones, efectuado con 12.000 adolescentes, muestra que de cada 100, la mitad es sexualmente activa. Solo un 37% rechaza las relaciones pre-matrimoniales, y un 50% dice tener buenos conocimientos sobre la sexualidad. Ya sabemos cuan alto es el número de abortos, y como aumenta de modo alarmante el embarazo de adolescentes. Todo esto nos habla de cuan urgente es impartir una educación sexual gradual, integral y centrada en valores éticos.


Urge una formación en el amor que lleve a la madurez sin caer en el puritanismo ni la permisividad. Muchos padres de familia y educadores deben cambiar de mentalidad para poder educar en la vivencia sana y positiva de la sexualidad. La sexualidad es una dimensión humana que abarca al hombre en todo lo que hace. Enseñemos pues la sexualidad con responsabilidad y desde un punto de vista cristiano, educando en los valores.


Foto: "El Beso" de Auguste Rodin

miércoles, abril 25, 2007

La violencia nos ataca otra vez


Rev. José Eugenio Hoyos
Nuevas Raíces
23 de abril de 2007


Todavía no nos hemos podido recuperar del golpe tan fuerte y tan vil que recibieron los 32 estudiantes de la universidad de Virginia Tech. El dolor de los familiares de estas víctimas inocentes se siente no solo a nivel local sino internacional. Lamentamos lógicamente lo sucedido, pero a la vez hacemos un llamado de atención y reflexión a todas las autoridades y al público en general. Quien causó esta tragedia es un inmigrante, un surcoreano, un estudiante resentido ante una sociedad que parece lejana a la situación que viven miles y miles de universitarios internacionales presionados y estresados por las deudas y los préstamos que conllevan a pagar una carrera.


Igualmente por la indiferencia de un futuro prometedor y de pocas oportunidades. Los inmigrantes que se quieren educar en estas grandes y famosas universidades tienen que pagar pensiones costosísimas, superar grandes obstáculos y pagar incansables sacrificios.

He tenido la oportunidad de participar del funeral de Daniel Pérez, de origen peruano, uno de los fallecidos en esta tragedia. Sus padres, Betty y Flavio me comentaban que además de la tristeza y la frustración, fue difícil para ellos ver los sueños truncados de su hijo Daniel. Irónicamente, en una de sus últimas conversaciones, les había comentado que cuando terminara su carrera de relaciones exteriores quería ser diplomático y empezar campañas para crear una fundación para erradicar la violencia juvenil, pues era una de las problemas sociales que le preocupaba en el mundo. Es cierto y da tristeza que para erradicar la violencia en las escuelas, universidades, en las ciudades y en el mundo entero, habría que cambiar muchas cosas a fin de que se superen las desigualdades económicas y todas las familias puedan disfrutar de una vida digna.

Ha llegado la hora de enseñar no solo tecnología, sino valores por doquier y a toda hora. Es hora de construír responsablemente un futuro de esperanza. Dios está con nosotros para alentar todo lo que comunique vida y optimismo. Solo en Dios debemos poner nuestra confianza y la protección de nuestros estudiantes.

Remembering Daniel Perez Cueva

Fr. Hoyos officiated Monday night at the memorial Mass at St. Elizabeth Ann Seton Catholic Church in Lake Ridge, VA for Daniel Perez Cueva, a 21-year old Peruvian student who was killed in the massacre at Virginia Tech last week. More than 200 people gathered to remember him and comfort his family.


"We are here because our prayers unite us and because we need each other in this time," the Rev. José E. Hoyos, director of the Spanish Apostolate for the Diocese of Arlington, said during the Mass.


At the Mass, which was offered in both Spanish and English, Hoyos spoke of Daniel's dreams to be a diplomat and to help bring an end to violence. "Daniel's dreams and hopes have not died with him," Hoyos said. "His soul, his thoughts, his joy and happiness will remain on live on earth."


Father Hoyos offered the family his prayers and those of all the priests in the diocese. "It's my duty to be there in good moments and bad moments and this is touching each one of us in the Spanish community," Father Hoyos said. "This is the time the Catholic Church has to show them compassion and love."


Memorial funds


According to Potomac News, two memorial funds have been set up in honor of Daniel Perez Cueva.


The first was set up by C.D. Hylton High School, where he graduated in 2004. Checks can be made payable to the Daniel Perez Cueva Memorial Fund and sent to the school at 14051 Spriggs Road in Woodbridge. Donations will also be accepted at Apple Federal Credit Union, which has branches in the school and at 8745 Mathis Ave. in Manassas and 14229 Potomac Mills Road in Woodbridge.


A second memorial fund was established by Linda DeSantis. Perez Cueva's mother, Betty Cueva, worked as a housekeeper for DeSantis for a year, she said.


DeSantis will serve as the trustee for the fund, which will help Cueva with expenses, she said.


Donations for that fund will be accepted at any Bank of America. To donate, ask for the Daniel Perez Cueva Fund.

viernes, abril 20, 2007

Nuestra Fe: Eucaristía -- Regalo de Amor


Rev. José Eugenio Hoyos
Boletín Interparroquial
22 de abril del 2007


Sí. Sus palabras son muy claras. En la Última Cena dijo a sus discípulos: "Tomad y comed todos de él; porque éste es mi cuerpo...El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna." (Jn 6, 35ss).


Es el momento de la Eucaristía, en que los fieles reciben "el pan del cielo" y "el cáliz de la salvación", o sea, reciben el cuerpo y la sangre de Cristo que se entregó por nosotros bajo las especies de pan y vino. (Jn 6, 51; CEC 1355) Con la comunión se planifica la reunión de la asamblea que vive de la enseñanza evangélica. Quienes comulgan dentro de la Eucaristía participan más perfectamente de ella. (SC 55)


¿Por qué es importante recibir la Eucaristía (la Comunión)?


Los fieles estamos llamados a participar activamente del sacramento de la Eucaristía para alimento del cuerpo y de la sangre de Cristo, pues él mismo dice: "Si no coméis la carne del Hijo del Hombre y no bebéis su sangre, no tendréis vida en vosotros." (Jn 6, 53) La Comunión alimenta y fortalece la vida del cristiano. La Comunión tiene su pleno sentido cuando se realiza dentro de una celebración eucarística. (Cfr. CEC 1384)

¿Cuándo hay que recibir la Sagrada Eucaristía?

Hay que recibirla frecuentemente o al menos una vez al año, si es posible, en tiempo pascual.

¿A que edad se puede recibir la Eucaristía?

De acuerdo a criterios pastorales, la Iglesia ha determinado que todo bautizado puede recibir el cuerpo y la sangre de Cristo (comulgar) cuando comprenda el significado de la participación en la Eucaristía acercándose a la Comunión. (Cfr. CIC 912-913)

¿Quiénes pueden comulgar?

Pueden comulgar todos los bautizados que estén debidamente preparados, que se encuentren en estado de gracia (sin pecado grave), y que han ayunado por una hora antes de comulgar. Quien haya cometido pecado grave desde su última confesión no debe comulgar sin antes acercarse al sacramento de la Reconciliación (haberse confesado con un sacerdote).

¿Por qué es importante hacer la primera comunión?

Porque en el proceso de iniciación cristiana es necesario prepararse bien cuando se va a recibir por primera vez este sacramento de la Eucaristía. Esto nos ayuda a tener una relación más intima con Jesucristo.

¿Se puede comulgar en un mismo día varias veces?

Sí. Quien haya recibido la Sagrada Eucaristía puede recibirla una vez más si es que está participando ese mismo día de otra celebración eucarística. No se puede comulgar más que dos veces al día. (Cfr. CIC 917)

¿Cómo se puede recibir la comunión?

La comunión puede recibirse directamente en la boca o en la mano. Extender la mano significa un compromiso total del cristiano y repite el gesto de los apóstoles en la Última Cena del Señor cuando recibieron de Jesús el pan eucarístico. La Iglesia permite a cada comulgante escoger la manera como quiere expresar su fe. (Normas Para La Distribución y Recepción de La Sagrada Comunión Bajo Dos Especies en Las Diócesis de Los Estados Unidos de América, United States Conference of Catholic Bishops)

¿Cómo debe hacerse la distribución de la Sagrada Comunión?

Primero la tomaran los concelebrantes, luego los díaconos y los ministros extraordinarios de la Sagrada Comunión; y luego se acercarán para darla a los demás fieles.

¿Siempre hay que recibir el cuerpo y la sangre de Cristo?

No. "Gracias a la presencia sacramental de Cristo bajo cada una de las especies, la comunión bajo la sola especie de pan ya hace que se reciba todo el fruto de gracia propio de la Eucaristía." Si uno esta enfermo o preocupado por enfermarse, puede absterner de beber del cáliz. (Cfr. CEC 1390)

¿ Cuáles son las condiciones para comulgar?

Tener fe en la presencia del Señor, hallarse en estado de gracia, y guardar el ayuno prescrito.

Abreviaciones:

CEC = Catechismus Ecclesiae Catholicae / Catecismo de la Iglesia Católica
CIC = Codex Iuris Canonici / Código de Derecho Canónico