Por Padre José Eugenio Hoyos.
A nuestras vidas hay que meterles una gran inyección Espiritual, una vida sin pasión es una vida frágil, aburrida, descolorida y que puede llevar a la monotonía y muchas veces a la depresión.
La depresión esta aniquilando muchas personas en nuestra sociedad actual por que en su vida personal existen grandes vacíos de motivación y de caminar con entusiasmo para conquistar o guardarle al futuro definitivamente eres realmente lo que te propones ser y lo que aceptas que eres realmente lo que te propones ser y lo que aceptas que eres, pero continuamente vives desinflándote y acabándote tu mismo en tus propias insatisfacciones, en tus absurdas comparaciones con los demás: ”si yo hubiera escogido mejor esa carrera universitaria y no la que elegí “. “Si me hubiera casado con mi primera novia, seria mas feliz”…”si yo fuera fuera famoso” “si mi casa fuera en otro país”...”si mis hijos hubieran ido a otra escuela”...”si mi situación económica fuera otra”…”si yo hubiera sido mas alto y mas delgado”...”si yo hubiera nacido en Estados Unidos”. Siempre en el error de conjugar el futuro desconocido en vez del presente concreto, empecinado en no querer ver que la felicidad es un estado subjetivo voluntario, no una realidad material concreta ni mucho menos una meta lograda.
La felicidad es convertir la vida en ilusión, en esperanza, en servicio, en metas alcanzables, en sueños, en amor, disfrutar de lo que eres y de aquello que posees. Sin lamentarte por aquello que te falta, incluyendo la petición decisiva de querer sanarte de cualquier enfermedad o de salir de una situación difícil.
La novedad de tu actitud positiva esta en que eres un constructor de vida sana, eres un puente para enlazar y unir, eres una brisa suave para calmar nervios e inyectar paz; cuando te propones hacer algo con entusiasmo Espiritual en el nombre de Cristo, lo logras, solo basta encender esa gran llama de Fe.
Tu existencia querido amigo(a) vivida en clave de autoestima positiva te proporciona ilusiones de vivir insospechados y sobre todo cuando respiras y sientes desde la concretez de cada día, de tu aquí, de tu hoy! Animo!
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