Por José
Eugenio Hoyos
Si usted es un verdadero Carismático 100% Católico Carismático
debe utilizar la mejor colonia, el mejor perfume que contenga el aroma y el
olor a Cristo.
Desde que Cristo se encarnó el mundo huele diferente. Hay otro
olor desde que Dios se presentó en la historia: El perfume de la salvación que
se ha esparcido por todos lados.
El Evangelista nos narra: “María tomo una libra de perfume de
nardo puro, muy costoso ungió con el los pies de Jesús y se los enjugo con los
cabellos. La casa se llenó del olor del perfume” (Lucas 7, 36-50).
Y San Mateo comenta que los Apóstoles se quejan de este
despilfarro “¿Por que este derroche?” (Mateo 26-8).
Este hermoso gesto de amor y adoración no lo entendieron. Desde
luego, ellos todavía no habían pasado por la experiencia de Pentecostés y
consideraban este encuentro de amor como un malgasto exagerado e inútil. ¡Necesitan
recibir en sus vidas la unción del Espíritu Santo, para saber de derroches.
Hoy en día nuestra Iglesia, y la Nueva Evangelización necesitan
del perfume y del aroma que esparce la Renovación Carismática Católica y en
especial los Carismáticos cuando oran, alaban y adoran a Cristo Jesús.
Nuestra vida forma parte de un propósito divino y cuando Dios
nos llama, no lo hace para que vivamos sin rumbo ni horizonte, sino que nos
invita a una vida plena. Nos regala dones, carismas, talentos, capacidades,
para que al ponerlos en práctica le demos gloria solo a Él.
La vida de los Carismáticos esta marcada por la necesidad de
descubrir ese perfume particular y único que agrada el Señor y que cada uno de
nosotros podemos dar. ¿Carismático a que huele tu vida?
El Apóstol San Pablo identifico al seguidor de Cristo con el
olor. En la segunda carta que escribió a los Corintios comenta: “Porque
nosotros somos el aroma de Cristo ofrecido a Dios” (2Corintios 2, 15).