sábado, agosto 18, 2007

"Los latinos viven una gran represión"



León Eduardo López
El Diario de Hoy (El Salvador)
Viernes, 17 de Agosto de 2007

El sacerdote y líder de la comunidad inmigrante mantiene la esperanza de alcanzar una ley justa


El sacerdote católico Eugenio Hoyos es uno de los rostros más conocidos en la lucha constante por conseguir un trato justo para los inmigrantes y, recientemente, por batallar por una reforma migratoria integral para los indocumentados en Estados Unidos. A su juicio, los latinos no están pidiendo nada regalado, sólo solicitan el reconocimiento por su trabajo en un país que adoptó su ideal de una vida mejor.

¿Cuál es la situación actual de la comunidad latina en Estados Unidos?

El tema de la reforma es un proyecto que se nos cayó cuando nosotros pensábamos que lo teníamos ganado. Eso le dio alas al pueblo norteamericano y a los condados para comenzar a presentar leyes que discriminan a todas aquellas personas que tuvieran apariencia latina. Comenzaron a cortarse los beneficios sociales, sobre todo, para la gente indocumentada. Empezaron a decir que los inmigrantes habíamos traído problemas y desorden a las ciudades, que había crimen y pandillas, que no pagábamos impuestos y nos llevábamos toda la asistencia social y una serie de cosas que son injustas para un pueblo trabajador. Estamos viviendo un caos, hay una descomposición social increíble. Estamos viviendo una terrible represión.

¿Cómo ha reaccionado la comunidad ante este panorama?

Ahora se están realizando campañas de concientización. Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias. Si hay que volver a marchar, lo vamos a hacer; si tenemos que boicotear, lo vamos a realizar. Hemos comenzado el diálogo, como debe ser, hemos utilizado todos los medios, pero si para cambiar las leyes necesitamos hacer una huelga de hambre o tenemos que ir a la cárcel, estamos dispuestos a hacerlo. Por esta causa vamos a luchar y vamos a hacer sentir nuestra fuerza.

¿Cuáles son los problemas que están afrontando los indocumentados?

Por ejemplo, las personas que son llamadas a testificar en casos como crímenes no quieren asistir porque tienen temor de ser deportadas. Una persona que tiene enfermedades mortales como tuberculosis no puede ir a un hospital porque no lo van a atender por no tener un seguro médico, igual en educación hemos comenzado a tener problemas.

¿Cuáles son las actividades que se vienen para exigir los derechos de los inmigrantes?

Estamos organizando para septiembre un boicot con la asociación Mexicanos sin Fronteras. Además, la próxima semana tenemos una reunión con diversas iglesias para decirle a la gente que este no es un tema exclusivo, es de los inmigrantes que necesitan luchar para que se les respete, porque si no, adónde está la libertad que pregona EE.UU. Lo que pedimos son leyes justas, pero que tengan un fondo moral. No estamos pidiendo nada regalado, queremos que se demuestre que Estados Unidos es un país de libertades".

>>Entrevista audio...

martes, agosto 14, 2007

Defendamos nuestro idioma

Rev. José Eugenio Hoyos
Nuevas Raíces
13 de agosto de 2007

Recientemente y con gran sorpresa, el condado de Culpeper en el norte de Virginia, ha declarado el inglés como la lengua oficial. Nos extrañó a todos ya que entendemos que eso no es una novedad; el inglés es el idioma nacional y nunca los inmigrantes hemos estado en contra de ello.

Por lo contrario, desde hace mucho tiempo hemos impulsado programas en la comunidad hispanoamericana para que nuestra gente aprenda no solo el inglés sino también sobre la historia de los Estados Unidos, la cultura y la obediencia a las leyes, etc. Lo que nos tiene preocupados es cual será la próxima prohibición pues el mensaje ya está claro: condado tras condado están firmando leyes y ordenanzas que atacan directamente a la comunidad más vulnerable y numerosa como es la latina. La comunidad empieza a expresar su miedo, su temor a los agentes de policía, a quienes en vez de verlos como protectores de la seguridad, en algunos casos se piensa que son opresores y perseguidores de las personas con apariencia latina.

Pocos programas de bienestar social, de salud, o educación para los más pobres se están dando; la caridad y la solidaridad desaparecieron del gobierno de Virginia. ¡Qué horror! Nos queda solamente nuestra ayuda personal o comunitaria. Lo que sí tenemos que aprender de todo lo que está ocurriendo es que tenemos que defender cueste lo que cueste lo poco que nos queda de nuestra dignidad y nuestro idioma español o castellano. Aprendamos inglés, claro que sí, pero continuemos nuestras campañas de priorizar el español a nivel del hogar, de la comunidad, en nuestras iglesias. No dejemos que mutilen el idioma más bello, más dulce y más romántico del universo: el idioma del amor. También nosotros pongamos nuestros propias leyes en los hogares, que cada casa sea territorio hispano, hablemos la lengua, escuchemos música en nuestro idioma, y cuando abramos las puertas del hogar busquemos que los hijos hablen el idioma oficial. Que nuestra resistencia y nuestra lucha sea para defender nuestra raza, nuestra herencia, nuestro idioma y que nos rindamos a dejar lo más bello que hemos heredado, nadie nos puede poner una venda en nuestras bocas para comunicarnos con nuestra lengua de origen. Ya otras cosas nos han quitando pero no nuestra identidad y dignidad.