Cuando contemplamos por unos instantes el rostro de Cristo y le miramos a sus ojos inmediatamente encontramos y experimentamos una gran paz.
En muchos eventos o retiros carismáticos le pido a la gente que cierre sus ojos y que por unos instantes traiga el rostro de Jesús y que a través de sus ojos hablen con el maestro para que encuentren Sanación y liberación de cualquier problema o situación por la que estés pasando.
La figura y palabra de Cristo nos
trae paz, y sobre todo alivio y confianza.
Jesús es nuestro gran ejemplo de confianza y de descanso en Marcos 6:31 nos dice: “venid vosotros aparte a un lugar desierto y descansad un poco”.
El mensaje es directo para todos! Descansa o te agotaras! Es muy fácil vivir ocupado, acelerado, estresado o gobernado por una infinidad de tentaciones, preocupaciones que agobian el Espíritu y no dejan respirar.
“por nada estéis afanosos, sino sean
conocidas vuestras peticiones ante Dios en toda Oración y luego, con acción de
gracias” (Fil4:6)
Por eso cuando tengas la posibilidad
de asistir a un retiro no vayas obligado, todo lo contrario condiciona tu mente
para que disfrutes minuto a minuto todo lo que estas oyendo, viviendo o
experimentando y recibirás grandes sanaciones, bendiciones y liberaciones.
Cuando trataban de presenciar a Jesús,
él decía: “Mi tiempo aún no ha llegado, el tiempo no se ha cumplido” así que
aprovecha cada instante de tu vida para llenarte de paz y confiar más en Cristo
Jesús.