miércoles, octubre 26, 2011

En la onda cibernética con Cristo


Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Cada día millones y millones de personas están tratando de buscar la existencia de Dios, el secreto de la vida eterna, el fin del mundo o la máquina de Dios a través del internet… algunos han encontrado algunas respuestas pero hasta ahora queda comprobado que solo a través de la oración, la meditación obtendremos un acercamiento personal con Dios. Hemos experimentado que ni un e-mail, ni el internet, ni los sistemas computarizados más sofisticados del mundo solucionan todas tus necesidades y tus problemas.

Como ser humano que recibes un gran bombardeo publicitario de la sociedad y el consumismo te codifican a vivir continuamente aferrado a la moda, al automovilismo, el turismo, el computador, las dietas para adelgazar, y la tecnología en general que tiende a crear necesidades hasta donde no hay. Pero principalmente en el campo de tu desarrollo personal, familiar, comunitario, no se restringe a los recursos humanos o facilidades tecnológicas con que cuentes, sino que este sobretodo en el convencimiento, firmeza, perseverancia y voluntad con que te lanzas y arriesgas en tus empresas. Así como en el auto evaluación positiva que hagas de ti mismo, pues para la obtención de buenos resultados necesitas creer más en Dios y en ti, y decirte a ti mismo: yo puedo, yo lo lograre. Asimismo sucede con los sistemas computarizados, pues cada día sale al mercado un nuevo producto que supera al anterior, y que si no lo compras te dicen que este atrasado, no estás en la onda cibernética etc.

Todo invento tecnológico o cibernético puede pasar de moda pero no Dios, nada lo supera ni lo puede reemplazar, podemos entrar sin miedo a la onda cibernética pero incluyendo a Dios. El Tweeter, MySpace, hi5, Facebook, y el internet en general nos puede acercar más a Dios si nos proponemos y dejamos que sea El con su gran mensaje que nos ilumine cada vez que hablamos de Dios y de su amor en nuestros mensajes. Dios espera más de nuestro aceptar su mensaje y no de nuestro rechazar, déjate iluminar por El, pues cada día tiene algo especial que comunicarte aunque sea por internet.



lunes, octubre 24, 2011

¿No te parece extraño que todos quieran ir al cielo?

Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Desde que conocí personalmente y me entregue 100% a Cristo ya nada me parece extraño, todo lo contrario, he abierto mi corazón al Espíritu Santo para que siempre este iluminado y ya en este mundo nada me parezca extraño.

Extraño solo a Dios cuando me ausento de Él, cuando lo coloco en un segundo lugar, eso sí es extrañarlo. Pero hablando de los extraños, quisiera que le diéramos una reflexión profunda a lo extraño, pues no podemos olvidar que la lógica del mundo y mi lógica son diferentes a la de Dios. ¿No te parece extraño cuan larga parece una hora cuando oímos de Dios? ¿Cuándo el sacerdote en la homilía se extiende un poco más? ¿Pero cuan cortó cuando nuestro equipo de futbol favorito dura solo 90 minutos?

¿No te parece extraño cuan larga parece una hora cuando estas en la iglesia, pero que cortas son cuando estas en la discoteca, el bar, un restaurante, en el cine o en los almacenes de compras o divirtiéndote en otro lugar? ¿No te parece extraño que no puedas pensar en algo que decir cuando rezas, pero no tienen ninguna dificultad en pensar cosas de que conversar con un amigo(a)? ¿No te parece extraño que puedes pasar horas y horas sentado frente al computador y al televisor y no sientes cansancio, mientras que frente al Santísimo te da pereza ponerte de rodillas por solo un minuto? ¿No te parece extraño lo difícil que es leer un capítulo de las Sagradas Escrituras, pero que fácil es leer 50 páginas de cualquier revista de farándula o de chismes?

¿No te parece extraño como las personas desean los asientos de frente en cualquier partido, o concierto musical, pero hasta se esfuerzan para buscar los asientos de atrás en las Iglesias? ¿No te parece extraño que necesitamos 2 o 3 semanas de aviso para incluir un evento religioso, una jornada de alabanza y sanación en nuestra agenda, pero podemos ajustar nuestra agenda para otros eventos en el último momento? ¿No te parece extraño que todos quieran ir al cielo siempre y cuando no tengan que creer, orar, pensar o decir alguna cosa que quiera esfuerzo? ¡Es extraño!, ¿no te parece? ¿Tú qué piensas? ¿No es extraño?