jueves, abril 18, 2013

Tiempo de Orar por las vocaciones hispanas.

 Por Rev. Jose Eugenio Hoyos.

No podemos desconocer que nuestra comunidad hispana sigue celebrando y disfrutando la elección del Papa Francisco. Ha sido un gran regalo de Dios a la comunidad Católica mundial.
Para nosotros en la Diócesis de Arlington es una obligación que oremos por las Vocaciones Sacerdotales y Religiosas.
Es importante que como hispanos apoyemos y animemos a nuestros hijos a que se eduquen, vayan a la universidad y sean grandes profesionales (médicos, abogados, maestros, ingenieros etc.) pero será más importante que les hablemos de la profesión más maravillosa como es el Sacerdocio.
Cada familia hispana debe ser un semillero de las vocaciones sacerdotales.
Nuestro ministerio hispano dentro de la Diócesis de Arlington, ha ido creciendo fuertemente en números y en Espiritualidad. Como nos dice San Mateo en el capítulo 9:37: “la mies es mucha, pero los obreros pocos: rogad, por tanto al señor de la mies que envié obreros a sus mies”.
Con la presencia del Papa Francisco estamos experimentando un nuevo despertar dentro de la Iglesia Católica, de la misma manera hay un despertar en la Vocación Sacerdotal y nuestra tarea como cristianos comprometidos es ayudar a descubrirla  en cada una de las personas bautizadas en la Fe.
El Sacerdote como todo cristiano está llamado a ser otro Cristo, tiene un desafío por delante y es el ser un agente cualificado de unidad. Cuando digo que es un agente de unidad es en su propia persona tratando de que su hablar sea un reflejo fiel de su interioridad, que los afectos de su corazón y su acción Pastoral nazcan de la profundidad de su amistad con Cristo.
El Sacerdote de hoy como persona comprometida con lo creado y con el creador, tiene el deber mayúsculo de luchar por recobrar la armonía con la naturaleza.Del sacerdote se espera hoy un equilibrio en su temperamento y en su actuar: capaz de enfrentar los problemas, tolerando lo terrible y comprendiendo las incomprensiones.
Pidamos a Dios Santos Sacerdotes llenos de esperanza y que inyecten a los fieles esa esperanza con autoestima positiva y enamorados de la Virgen María; imitadores de Cristo y del Evangelio.

miércoles, abril 17, 2013

Devolvámosle el Ministerio de Sanación a la Iglesia Católica.

Por Rev. José Eugenio Hoyos.

Llevamos más de 29 años desarrollando, viviendo, experimentando y escuchando poderosos testimonios de Sanación en nuestra Diócesis de Arlington, Virginia y todavía encontramos feligreses que piensan que estos Ministerios de Sanación, Intercesión y Liberación solo pertenecen a las Iglesias evangélicas o pentecostales, se nos ha olvidado el mandato de Cristo Jesús como único salvador y sanador que en las mismas Sagradas Escrituras nos anima a realizar y continuar su obra en Lucas 9:2 dice “que hemos de Predicar el reino de Dios y Sanar a los enfermos”.

¡Cuántos enfermos hoy en día le piden a Jesús Sanación en la Iglesia Católica! Millones cada día se aferran a la Oración para pedir Sanación. El poder de Cristo sigue, ha existido y seguirá existiendo por siempre.

Los enfermos necesitan con urgencia en nuestra Iglesia Católica que le ayuden a encontrar al único y verdadero, Cristo cirujano divino y así aferrarse a la esperanza y gozar de una vida más fortalecida y saludable.

En muchas Diócesis en el mundo Católico están tomando con mucha seriedad  estos ministerios que juegan un papel de suma importancia en la Fe de los Católicos. Es la respuesta a una pastoral efectiva para la salud de de los enfermos.

Lógico que la Renovación Carismática Católica nunca ha desconocido el papel fundamental del Sacramento de la unción de los enfermos dada solo a los Sacerdotes. Pero los laicos en los grupos de Oración juegan un papel primordial.

Todo el que desee participar de estos ministerios debe tener una formación profunda sobre la Iglesia y su doctrina. Este ministerio no es para todos, ni se debe imponer las manos sin la preparación adecuada, deben haber tomado el seminario de vida en el espíritu, tener los Sacramentos y mínimo debe ser parte activo de un grupo de Oración por más de 3 años, el Ministerio de Sanación es un canal abierto al amor de Dios sobre los enfermos. La Iglesia debe animar, formar y promover estos Ministerios que hacen mucho bien a la Iglesia.

lunes, abril 15, 2013

Misa de Sanación con el Padre Hoyos en Leesburg, Virginia.


Por Fidel Hurtado-Zapata
Miles de personas llenaron desde tempranas horas las instalaciones de la moderna y amplia Iglesia del Apóstol San Juan en la ciudad de Leesburg que pertenece a la Diócesis de Arlington, Virginia.

Fue impresionante el lleno total, la expresión de Fe y la profunda Oración que se vivió en esta ocasión en donde todavía el mundo Católico continúa celebrando la Resurrección de Cristo.
Las lecturas y el Evangelio del día se prestaban para que la cantidad de asistentes pudieran sentir la presencia de Cristo Resucitado, trayendo Sanación y Liberación sobre todos los enfermos y necesitados de Oración.

Cada mes el padre José Eugenio Hoyos director de la Renovación Católica Carismática de la Diócesis de Arlington, Virginia acompañado con los Ministerios de Sanación, Liberación e Intercesión celebra esta Misa en las diferentes parroquias de la Diócesis.

En esta ocasión el Padre Hoyos acompañado del Padre Andrés Fernández después de la celebración de la Santa Eucaristía se ubicaron en los diferentes grupos donde interminables filas de enfermos y personas necesitadas de Oración esperaban pacientemente la imposición de manos y así poder recibir paz y alivio por medio de las oraciones.

El Padre Hoyos recalcó entre los asistentes que el tiempo de los milagros continua con más fuerza y que no solo hay que creer, sino creerle a Cristo; pues Cristo, su sangre y sus llagas tienen poder Sanador. Una vez más ante la sorpresa de los asistentes escuchamos y vimos Sanaciones de migrañas, cáncer de ovarios, de próstata, colon, pulmones, solución a problemas de inmigración, depresiones etc.

Dios se está manifestando grandemente, yo no me pierdo ninguna misa de Sanación porque estoy siendo testigo que cada vez más que Cristo está vivo y eso tonifica y fortalece mi Fe nos dijo Juan González miembro de la Iglesia de San Antonio de Padua en Falls Church, VA.

Pues cuando todo el pueblo habla de que están viendo Sanaciones Cristo sigue trayendo multitudes.