miércoles, enero 14, 2009

Presidente Obama: “Recuerde, ningún ser humano es ilegal, no olvide a los inmigrantes”

Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Dentro de pocos días el mundo entero y muy cerca de nosotros estaremos siendo testigos de la toma de posesión del 44 presidente de los Estados Unidos, Barack Obama. Hay muchas expectativas sobre la presidencia del primer Afro Americano siendo presidente en el país considerado la primera potencia mundial. Para los que pertenecemos a las minorías dentro de los Estados Unidos nos llena de grades alegrías y satisfacciones pero igualmente de muchas preocupaciones. El nuevo presidente recibe una nación golpeada por la crisis económica, el terrorismo y los estragos de los desastres naturales. Su antecesor, el presidente George W. Bush, lleva consigo una cuenta de cobros de torturas, apoyo a la guerra, la caída de la bolsa de valores y en el plano migratorio el más alto índice de redadas y persecuciones migratorias más alta de la historia de los Estados Unidos.

Es por eso que desde esta columna y con las plegarias de más de 14 millones de indocumentados pedimos al nuevo Señor Presidente Barack Obama que en su agenda presidencial, le de cómo prioridad a una reforma justa y moral al sistema de inmigración. Como hijo de inmigrantes y buen conocedor del tema, la solución a nuestras familias inmigrantes, al conceder una amnistía sin miedo, una residencia temporal a los que aman y han servido a este país sin ningún problema judicial, mostraría al mundo entero que el programa de su campaña política “cambio” sí fue una realidad y no una propaganda más.

Señor Presidente, usted no puede ignorar que Estados Unidos de América ha sido un pionero de los derechos humanos y el seguir deportando a cada inmigrante es la mayor violación de esos derechos civiles fundamentales. La solución, Señor Presidente, al problema de inmigración ilegal es no hacerla aún más difícil y peligrosa, sino eliminar las causas de inmigración ilegal. Una política migratoria más comprensible y generosa nos capacitará mejor a tener un control más justo a ciertas personas que cruzan las fronteras. En su gobierno se debe crear una cultura de inmigración donde todo el pueblo Estadounidense recuerde y aprenda los derechos y deberes de los inmigrantes. Al legalizar a 14 millones de indocumentados esta acción traerá una gran bonanza económica y se reactivará positivamente la economía, pues en las manos de los inmigrantes se mueve el futuro económico de América.

Nuestras oraciones y solidaridad para las victimas en Atanquez

Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Con mucha tristeza y pesar se nos informó sobre la tragedia ocurrida a final de año en la región de Atanquez, el resguardo indígena Kankuamo en el departamento del Cesar, en Colombia. Lo que más nos ha impactado es que los pocos días de haber visitado a la población de Atanquez repartiendo la ayuda humanitaria a los niños y ancianos haya explotado una granada quitándoles la vida a varias personas del área e hiriendo de gravedad a 62 personas más. Pues la mayoría de ellos se encontraba celebrando la fiesta de fin de año.

Esta tragedia honestamente toca directamente a nuestra institución MAPAVI, ya que la Señora Marelvis Mandiola de 48 años, participó en nuestra actividad benéfica solidaria como voluntaria. Ella fue la encargada de limpiar la plaza principal de Atanquez después de nuestra actividad. La noche anterior al dialogar con Marelvis le pedí que la plaza debería quedar inmaculada y para mi sorpresa al levantarme bien temprano, todo estaba en completo orden como habíamos convenido. Y cuando lo comente sus amigos me dijeron y eso Padre Hoyos que Marelvis andaba con las manos lastimadas, pero para ella primero estaba la responsabilidad.

Y desde la tierra entendemos que todas las victimas inocentes incluida Marelvis ahora gozan de una gran paz en el cielo. Y como ángel celestial siempre desde las alturas Marelvis estará pendiente de que el parque principal de Atanquez este limpio y en orden y que cada árbol tenga sus hojas llenas de verdor. De nuestra organización MAPAVI, y en nombre de las 24 Iglesias Católicas de la Diócesis de Arlington nos unimos en oración y en plegarias por las victimas de esta tremenda tragedia. Que reciban nuestras condolencias el maravilloso pueblo de Atanquez. Que Dios los proteja y bendiga siempre.

Foto: Despedido para los primeros fallecidos en el ataque en Atanquez, cortesía Souldes Maestre, www.atanquez.com

lunes, enero 12, 2009

Y continúan los milagros desde Bolivia

Con gran gozo y dando gracias a Dios, continúan llegándonos testimonios de milagros ocurridos en el Encuentro Internacional de Pentecostés celebrado el mes pasado en Santa Cruz de la Sierra en Bolivia. Son varios los milagros que estamos recopilando y que queremos compartir con ustedes:

“Padre Eugenio Hoyos, a pasado un mes después de su visita a Bolivia – Santa Cruz. Para el Encuentro en La Mansión. Usted me dijo que yo le escribiera y le cuente todas las maravillas que el Señor hace conmigo. Yo ore con usted dos veces donde el hermano Walther Estensoro, se acuerda, que la primera vez, fui con mi esposo, le conté una parte de mi testimonio, los gozos que el Señor estaba haciendo conmigo, cuando yo sentí su llamado, ahí estuve arrodillada ante sus pies, de esto hace exactamente 7 meses. Yo le conté que yo no podía embarazarme, y usted hizo que mi esposo pusiera su mano en mi vientre y empezamos a orar y usted, me dijo con mucha seguridad que yo iba a quedar embarazada, luego yo volví sola, para hablar con usted, quiero que se acuerde bien de mi. Padre Eugenio, sucedió el milagro, nuevamente fui bendecida por nuestro Señor Jesucristo, el mismo Cristo de ayer que sanaba enfermos, ese es el mismo Cristo de hoy, que me sano y ese es el mismo Cristo que va a reinar siempre por los siglos de los siglos. Un mes después del Encuentro, un mes después que ore con usted, sucedió el milagro. ¡Estoy embarazada! Siete años que soy casada, visite toda clase de médicos, ginecólogos, y nunca pudieron saber lo que tenia, hace 7 meses que voy a La Mansión, y persevero en la fe, se lo pedí de corazón al Señor y ocurrió el milagro, me dijo que el era el médicos de médicos y el único que me podía sanar, Padre, no sabe lo feliz que estoy, mire lo que Dios hace conmigo, estoy de 5 semanas de embarazo, fui donde mi Doctor, el me había hecho inseminación, el año pasado en noviembre me hizo un invitro, tampoco resulto y cuando yo me entregue al Señor, el hizo su obra en mi, el 25 de no siembre, no me vino mi periodo, y yo dije Señor que se haga tu voluntad, tu sabrás cuando me va a venir mi periodo y pasaron los idas, empezaron a dolerme los pechos y tenia acides, me vino una leve felicidad pero tenia miedo de que so fuera eso, fui al laboratorio para que me saquen análisis, cuando lo leo que felicidad decía positivo, me puse a llorar y a darle gracias a Dios, horas después me fui donde mi ginecólogo para que lea el análisis y me dijo estas embarazada, me saco una ecografía y me confirmo el embarazo, las palabras del medico fueron “lo que yo no pude hacer, lo hizo Dios, Dios la quiere mucho Jenny para hacer este milagro en usted” me abrazo de felicidad y ambos lloramos, el Doctor es especialista en fertilización, lo mejor que tiene Santa Cruz en ginecología avanzada. Pero Dios me dijo yo soy el medicote médicos, lo que el hombre no lo puede hacer yo lo ago. Bendecida y encendida me siento Padre Eugenio Hoyos. Voy a escanear mi ecografía para que usted la vea y la muestre al mundo entero que con Dios no hay nada imposible, ese mismo sábado 20, conté mi testimonio en mi grupo y muchas personas lloraban y me abrazaban dando gloria al Señor Jesús. Padre, no se siestaza bien, quiero que usted opine, yo quiero contar mi testimonio un domingo en La Mansión, pero cuando tenga tres meses de embarazo, no se si estar bien, espero su pronta contestación, estoy tan feliz, usted no se imagina lo feliz que soy, Padre Eugenio reciba un abrazo fuerte de mi parte y de parte de mi esposo también, estamos muy agradecidos con usted que Dios lo bendiga y lo guarde siempre. Abrazos, Jenny Ojeda Vaca”.

Atanquez: una misión de paz y esperanza

Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Al llegar a Atanquez me preguntaban los pobladores: ¿Usted es el Padre Hoyos de Barranquilla? ¿Usted habla español? ¿Es colombiano? La curiosidad de cientos de niños que con sus ojos traviesos querían saber que venia en las grandes cajas de regalos traídas por la fundación benéfica Marcelino Pan y Vino Inc., MAPAVI, llenó de sonrisas y de alegría a los habitantes del resguardo indígena de Kamkuamo en Atanquez, departamento del Cesar en Colombia.

En realidad es una región de grandes sorpresas, de contrastes climáticos espectaculares, de gente honesta, alegre y muy echada para adelante, ó sea muy trabajadora. Valledupar, la capital del departamento, es considerada la cuna de la música vallenata. Allí se celebra cada año el Festival Mundial de Vallenatos. Es una tierra calida, localizada en la Sierra Nevada de Santa Marta.



Pero desafortunadamente la población de Atanquez da la impresión de ser un resguardo olvidado por sus gobernantes. Los voluntarios que participemos en la entrega de los regalos a los niños y ancianos pudimos constatar que por ejemplo, la carretera principal para entrar al resguardo indígena está bastante deteriorada. Es difícil llegar allí por la cantidad de huecos y desniveles de los caminos.



A pesar de estos inconvenientes, la gran sorpresa es encontrar un Atanquez majestuoso de callecitas empedradas, de casas bien cuidadas y de diferentes colores con un paisaje paradisiaco y con una población tan alegre que contagia a todos los visitantes. Con su característica amabilidad, todos los voluntarios de MAPAVI fuimos recibidos con mucha alegría al son de cumbia, gaitas y vallenatos.



Aproximadamente 50 voluntarios de MAPAVI dirigidos por Rosalba Gutiérrez y la familia Gutiérrez Pacheco se repartieron regalos a 350 niños y 120 ancianos. El 28 de diciembre, día de los inocentes pudimos llevar a esta población sufrida anteriormente por la violencia y por el enfrentamiento entre paramilitares de las FARC, una sonrisa a cada niño adulto y anciano para devolverles por un día la paz, la alegría y la solidaridad.



Desde los Estados Unidos y de parte de nuestra organización MAPAVI deseamos que en el 2009 Atanquez regrese a la paz definitiva y que ante el mundo se muestre este resguardo indígena como un centro turístico de atracción mundial. Le damos gracias a Dios porque una vez más hemos cumplido con nuestra misión de llevar una “Sonrisa Solidaria a los más necesitados”