viernes, octubre 17, 2014

El Padre José Eugenio Hoyos habla sobre la imposición de manos.

Por Fidel Hurtado-Zapata.


En uno de los talleres en el encuentro católico carismático celebrado en Quito, Ecuador el Padre José Eugenio hoyos habló a la masiva asistencia a este gran evento internacional sobre la importancia y la necesidad de tener una cultura sobre la imposición de manos.
El Padre Hoyos pidió a los líderes Carismáticos  Latinoamericanos y centroamericanos a educar y dar formación sobre estos dones en la Sanación y liberación tan importantes para la edificación de la Iglesia.

En la renovación Carismática debemos entender que la imposición de manos no es un rito, como lo es el del Sacramento de la Confirmación y del orden Sacerdotal. La imposición de manos sobre la persona por quien se ora es un gesto fraterno, un gesto de amor, un signo de fraternidad cristiana y por ultimo un gesto Bíblico. El mismo Evangelio de San Marcos 16,18 nos dice: “impondrán las manos sobre los enfermos y sanaran” es entonces un mandato divino del mismo Cristo Jesús.


La imposición de manos en el Ministerio de Sanación tiene un significado importante en cuanto que el que Ora por un enfermo” hace de puente” (por así decirlo) del amor sanador del Padre- Dios hacia la persona por quien se Ora.
Cuando oramos por un enfermo extendemos nuestras manos sobre su cabeza no hacemos otra cosa que ejercer  un acto de intercesión y mediación entre Dios y la persona enferma y esto de tal modo que con frecuencia se siente correr y fluir en la persona que impone las manos una gran energía curativa hacia la persona por quien se Ora.

La imposición de manos en la Oración de Sanación expresa con más intensidad en el amor sanador de Dios, ya que hay un contacto físico que no existe con la palabra. Cuando todo un grupo de oración en un evento masivo se Ora por los enfermos más Sanaciones y Liberaciones sucederán.

jueves, octubre 16, 2014

El Padre Hoyos invita a los Carismáticos a renovar la Renovación.

Por Fidel Hurtado-Zapata.


El Padre José Eugenio Hoyos uno de los predicadores principales del encuentro Católico Carismático celebrado recientemente en Quito, Ecuador. Hizo un llamado a los miles de asistentes y delegaciones llegadas de diferentes partes de Latino América y Centro América a vivir con intensidad; compromiso y a vivir un nuevo Pentecostés.
Los Carismáticos estamos llamados a darle vida a la Renovación Carismática: “Renovando la Renovación” los Carismáticos debemos prender el fuego, el avivamiento, el gozo, la pasión por esta gran fuente de gracia que nos ha traído muchas bendiciones a la Iglesia actual.

Somos la nueva generación que está moviendo el motor de la Iglesia a través de la Oración, la Adoración y la Alabanza.


Desde nuestra perspectiva cristiana, nuestra vocación va de la mano con nuestro llamado, el cual Cristo pensó para que puedas afectar en tú realidad y en la vida de los demás, como una respuesta de sentido que nos permita abrazar la gran lluvia de bendiciones, dones y carismas.
¡Así es! Los carismáticos para poder descubrir nuestra verdadera vocación en la nueva Evangelización debemos ser perseverantes en la oración, ser activos en las Iglesias locales, tener un contacto muy personal  con la gente, utilizar las paginas digitales y los medios de comunicación con el solo propósito de Evangelizar, no andar brincando en otros movimientos. Pues Dios ha pensado en nosotros desde la eternidad, con un llamado único, genuino y personal (Jer. 1-5) es hora de darle el puesto a la gente joven, las nuevas directivas necesitan sangre nueva, ideas renovadoras, pues la Renovación Carismática necesita urgentemente ser renovada. Para que se sienta de nuevo el ardor del Espíritu Santo.


Nos falta de nuevo encender el fuego del gozo de la Oración y de la Alabanza.

miércoles, octubre 15, 2014

Tus hijos son el reflejo de tus valores.

Por Rev. José Eugenio Hoyos.


Para nuestra comunidad hispana la familia siempre ocupara el centro de importancia en nuestras vidas. A pesar de que como familia inmigrante que somos no podemos perder nuestra cultura, nuestra historia y menos nuestra FE  en la Religión Católica  que profesamos.
El ser humano es tan misterioso como insaciable en todas sus dimensiones y los padres de familia no escapan a esta realidad concretamente en su relación con los hijos, pues aunque duela debes admitir que está llena de verdad la afirmación que dice “Las personas solo aprendemos a ser hijos, después de ser padres y solo aprendemos a ser padres después de ser abuelos”.

Pareciera como que la vida te maltrata y no te permite vivir con intensidad cada experiencia. Pero es lo contrario, la vida misma te concede la oportunidad para que te realices desde tu libertad, lo que sucede es que el ser humano, unas veces orgulloso y otras veces humilde necesita en sus adentros ser él y después que cae en la cuenta de sus omisiones, de sus errores entonces se lamenta por el tiempo que cree perdió, mas es así como aprende a valorar y a ver lo que antes no veía con claridad.


Por ejemplo, si como padre o madre ves importante la música de piano para tu hijo; desde pequeño le inculcaras enamoramiento, pasión, dedicación por dicha música.
No se trata de imponer gustos y decisiones a tus hijos sino de presentarles varias opciones de desarrollo de sus facultades, pues cuando tu hijo nunca ha palpado una realidad, lo más posible es que jamás se interesara por ella.

La clave está en vivir con intensidad, cada momento, cada día, semana tu relación con tus hijos, con los demás y colocándole una dosis mayor de empeño a tus propósitos, no dejar para después  lo que puedas realizar ahora, consciente ya de que lo que tu papá o tu mamá, dejes de hacer por tus hijos, no lo hará nunca nadie y que lo que dejes de hacer lo sentirás siempre como un vacío que tú misma historia personal se encargara de reclamártelo.
Si tu hijo te ve Orando y perseverando en la Iglesia; cuando crezca hará lo mismo.


Recuerden padres de familia que llegara un momento en que sus hijos tomaran las riendas de sus vidas y entonces actuaran a partir de los valores o los antivalores que le diste como semillas y como testimonio y que podrá tenerte o no como su mejor amigo y confidente. Y recuerda que familia que Ora unida permanece unida, no se te olvide que todos somos la gran familia de Cristo nuestro Señor quien vive y reina por los siglos de los siglos ¡Amen!

martes, octubre 14, 2014

Una Misa de Sanación para todos

Christine Stoddard | Catholic Herald

 
 
 
Salvación se dice “salus” en latín, la misma palabra de origen para la palabra castellana “salud.” Entonces, la salud es un tipo de salvación. Y para la salvación, se ora. La salud de los fieles es el enfoque en una Misa de sanación—y todos los hispanoparlantes locales pueden orar para la fortaleza física de nuestra comunidad el 11 de octubre.
La Renovación Católica Carismática de la Diócesis de Arlington y el grupo de oración de la Parroquia San Carlos Borromeo le invitan a una Misa de sanación celebrada por el Rev. José Eugenio Hoyos. Será en la Parroquia San Carlos Borromeo (3304 N. Washington Blvd., Arlington) a las 8 de la noche.


El Padre Hoyos es director del Apostolado Hispano de la Diócesis de Arlington y asesor espiritual de la Renovación Católica Carismática de la diócesis. Tiene una reputación internacional como predicador sobre sanación y liberación. Ha escrito cuatro libros sobre sanación: Bendecidos, Sanados y en Victoria; Sanados Setena Veces Siete; Los Milagros y las Sanaciones no suceden cuando lloras sino cuando oras; y Jesús sigue sanando.
Es importante saber que la Misa de sanación no es un rito mágico. La creencia es que durante la celebración de la eucaristía normal, el Espíritu Santo nos inspira a buscar una solución de caridad. En las palabras del Padre Hoyos en su ensayo “Los Católicos no somos supersticiosos” (el Catholic Herald, edición 2/10/14), “Todo Católico bautizado debe creer solo en Jesucristo; El es el Hijo de Dios y Padre Nuestro…Superstición es una creencia semireligiosa irracional infundada, que trata de convencer a las personas de que ciertas obras, objetos o números pueden traerle suerte o desgracias.

Para más información sobre las Misas de Sanación, se puede llamar a Jesús Villanueva al 301/806-7653.
Se puede mandar un correo electrónico a Christine con sus preguntas y noticias: cstoddard@catholicherald.com.