Como pasa el tiempo de rápido y no nos damos cuenta, son las expresiones de una gran mayoría de católicos que se están preparando para recibir la Cuaresma y vivir este tiempo Espiritual en Fe, Oración y penitencia. Este es un tiempo maravilloso para que renovemos y cambiemos nuestras actitudes mundanas y tengamos un encuentro personal con Cristo Jesús.
Son solo 40 días y ojala fuera todo el año donde reanudamos nuestro compromiso de amistad con quien de verdad dio la vida por cada uno de nosotros en la cruz en aquel Gólgota.
Nuestra obligación como bautizados
comienza el miércoles de Ceniza y termina antes de la cena de Jesús el Jueves
Santo.
El color morado lo vamos a ver en
las casullas y en las estolas de los Sacerdotes, Obispos y Diáconos. Se utiliza
el morado porque es el signo de la penitencia, del silencio, del respeto a lo
sagrado y es también luto.
Nuestra Iglesia Católica en el
mundo Cristiano nos invita vivir la Cuaresma viviendo y practicando el
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo en Oración dedicando un buen tiempo en
silencio ante el Santísimo Sacramento, visitando los enfermos, pidiendo por los
prisioneros, rogando a Dios por los países que están en violencia o lugares en
conflicto y siendo generosos compartiendo con los más necesitados y siendo
solidarios con las familias indocumentadas que sufren.
Es tiempo importante de vivir a
plenitud el Sacramento de la penitencia y de reconciliarnos definitivamente con
Dios, en este tiempo arrojando fuera el pecado, el rencor, los comentarios
negativos, los chismes, las envidias las divisiones, los odios, la pereza; así
es como ayudamos a cargar cada día la luz de Cristo nuestro Señor.
Cristo es una necesidad
apremiante para nuestro mundo de hoy “Cristo se entrega a si mismo por la
Iglesia su esposa, para hacerla Santa purificándola por medio del baño por la
palabra a fin de hacer comparecer ante sí a su Iglesia toda gloriosa, sin mancha, ni arruga, ni nada
semejante, sino Santa e inmaculada” (2 Corintios 5-15).
El ayuno, la perseverancia en la Oración
y la caridad son los grandes signos de vivir en Cuaresma.
San Pedro Crisologo obispo y
Padre de la Iglesia afirma: “Estos tres resortes hacen que la Fe se mantenga
firme, la devoción sea constante y la virtud permanente porque la Oración
llama, el ayuno intercede, la misericordia recibe.
Oración, misericordia, ayuno
constituyen una sola y única cosa y se vitalizan recíprocamente”.
Tenemos 40 días para que
colaboremos y participemos activamente en la campaña Cuaresmal de nuestro
Obispo Laverde que beneficiara directamente todas las obras de caridad y
apoyaran los programas de la nueva evangelización, nuestra caridad empieza en
casa.