por Alfonso Aguilar
Arlington Catholic Herald
31 de enero de 2008
Para el 2008 la Oficina del Apostolado Hispano concentrará sus esfuerzos a efecto de darle continuidad a los programas ya existentes, y a reestructurar ciertas líneas que no tienen una clara identidad basada en las directrices de la Diócesis de Arlington. De igual manera buscará una mejor integración dentro de la diócesis, como parte de una sola familia y no como una comunidad separada por su origen o lengua.
Así lo explicó el Padre José Eugenio Hoyos, director ejecutivo, al hablar sobre las tareas y desafíos de su oficina para el año que recién comienza.
“Otra necesidad es trabajar muy de cerca con la Oficina Multicultural que dirige el Padre Richard Mullins, y fortalecer la visión pastoral de la feligresía a través del Instituto de Formación Pastoral.” El Padre Mullins es también director asociado del Apostolado.
El popular religioso destacó que actualmente se realizan servicios en español en 35 parroquias, y que al menos unas 3 o 4 más podrían establercerlos este año o en los próximos. “Pero no es algo sencillo,” agregó y explicó que aunque las apariencias hablan de grandes necesidades, se trata de procesos que deben llevarse con calma y certeza.
“por eso en el año previo vimos que unas dos parroquias establecieron solo una misa de ocasión a modo experimental, para ir sembrando el terreno de lo que puede ser algo definitivo,” dijo y mencionó que la feligresía debe entender que la escasez de sacerdotes impide “abrir por abrir” misas en español.
Al respecto explicó que otra meta de su oficina es gestionar el traslado de sacerdotes de habla hispana para cubrir la demanda.
“En estos momentos estamos en conversaciones con obispos de diócesis en El Salvador, Nicaragua, Honduras y Mexico,” informó.
Mientras tanto, dijo, lo importante es lograr que los sacerdotes aquí motiven a sus feligreses a enriquecerse sus conocimientos religiosos e académicos a través de cursos sobre la Biblia, encíclicas, doctrinas, etcétera, y apoyar a los pastores que toman la decisión de abrir misas en español.
“Queremos una pastoral más agresiva. La meta es involucrar más gente en los concejos diocesanos, y enlazar a estos con los eventos anuales,” y mencionó entre otros las Jornada Matrimoniales, el Festival Infantil y de la Familia, cursillos de cristiandad, y los recién establecidos concursos de música para personas de todas las edades.
El concurso “Buscando una Estrella para Jesús”, ya en su segundo año, dio origen a un segundo para menores, “Buscando una Estrellita para Jesús”. “Ambos eventos atrajeron a cientos de personas y fueron un verdadero éxito, un magnífico canal para unirnos y crecer con la fiesta del canto religioso.”
El religioso también cree que a través de los ministros extraordinarios de la eucaristía se puede llegar a quienes aún no reciben los sacramentos, pero para ello se requiere, dijo, darles a los ministros más resfuerzos espirituales.
Insiste que no habrá nuevos programas, o acaso alguno pequeño sobre la marcha, pero anuncia que en este 2008 tendrá lugar un retiro para todos los laicos y talleres a nivel diocesano para matrimonios, adolescentes y jóvenes adultos.
“La idea es enriquecer espiritualmente a nuestra comunidad y desarrollar una relación más comprometida con la iglesia,” dijo. “Las vocaciones y la vida consagrada debe estar presentes y animadas en el seno de la familia hispana.”
Y con respecto a la iglesia misma, dijo que esta no puede estar ajena a las elecciones, a los asuntos de inmigración, justicia, paz y oportunidades de educación.
A efecto de avanzar por terreno seguro en los próximos años, el sacerdote dijo elaborarán un reporte detallado de la feligresía latina en la diócesis, como si fuera una especia de censo, porque hasta hoy no hay reportes específicos de quiénes y cuántos son. Desde hace algunos años se dice extraoficialmente que al menos un 30 por ciento de todos feligreses son de origen hispano, pero al no existir un sostento oficial, no es un dato presente en la oficina del obispo Paul S. Loverde y sus asesores directos.
“Lo que sí es claro," concluyó el Padre Hoyos, “es que seguimos creciendo y esa presencia la reconoce el obispo al asistir cada vez con más frecuencia a actividades hispanas.”
El Padre Hoyos asumió la dirección del Apostolado hace tres años. Con excepción de Antonio Pérez-Alcalá, del ministerio juvenil, todo su actual personal es nuevo y más grande. El personal lo integran, además, Marlene Orellana-Zelaya, coordinadora del Instituto de Formación Pastoral; Ivonne Granados, coordinadora de Programas Pastorales; y las asistentes administrativas Nicki Alemán, Karla Alemán, y Corinne Monogue.
1 comentario:
Padre Hoyos lo felicito por su gran esfuerzo y por su ardua labor en el Apostolada Hispano, y en todo el mundo, desde El Salvador lo incentivamos a que siga adelante. Sabe que cuenta con nuestro apoyo.
Rosselia Mora
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