jueves, octubre 16, 2008

Cuidemos nuestra Iglesia y nuestros sacerdotes

Por el Padre José E. Hoyos
Arlington Catholic Herald
16 de octubre de 2008

Dentro de nuestra vida de fe, todos queremos practicar las obras de misericordia, la caridad, la oración, servir de cualquier forma en la Iglesia. Otros tienen los deseos de ser misioneros en países en vía de desarrollo.

Toda nuestra vida espiritual se centra en la Iglesia, pero no en una Iglesia cualquiera, sino la Iglesia Católica, fundada por Nuestro Señor Jesucristo. Después de los apóstoles, nos dio al primer Papa San Pedro y luego a los sacerdotes. Hoy en estos tiempos difíciles económicos, políticos y la pérdida de valores morales es tiempo que recapacitemos, de integrarnos más a la Iglesia, en participar, a colaborar y a querer a los sacerdotes.

No solamente quererlos pero apoyar con la oración las vocaciones sacerdotales y religiosas. Ahora las vocaciones son pocas pero por eso hay que protegerlas y orar para que hayan más. Al sacerdote, hay que cuidarlo y quererlo, porque él también es humano y por lo tanto se puede equivocar, pero eso no quiere decir que por su investidura no siga siendo especial.

Las personas se desilusionan con la Iglesia por muchas razones entendibles. La lista podría ser bastante larga. En lugar de asustarnos y sorprendernos, debemos recordar que la Iglesia esta formada por pecadores de carne y hueso, incluyéndo a nosotros mismos. Nos lastimamos unos a otros, a veces en forma intencional y otras veces sin mal intención, porque somos pecadores.

Pero en vez de abandonar la Iglesia, necesitamos quedarnos para resolver el asunto si esto es de alguna manera posible. Si te divorcias de tu Iglesia a la primera señal de decepción o de desilusión, eso es señal de inmadurez. Dios tiene cosas que quiere enseñarte y a los demás también.

Todas las Iglesias tienen sus propias debilidades y problemas. Pronto volverás a sentirte decepcionado. ¿Qué estas haciendo para que la familia de tu Iglesia sea más calida y fraternal? ¿Qué es lo que más te gusta del sacerdote de tu parroquia?

5 comentarios:

Rebel Girl dijo...

La cuestión es: Hasta cuando debe una persona quedar en una relación sin amor y respeto mutuo, que sea una pareja o una parroquia? En estas situaciones uno siente su espiritualidad desvaneciendose poco a poco. Y no es cuestión de “querer” o no a los sacerdotes. Pero sí hay que respetarlos y ver en ellos el imagen de Jesucristo. Si este imagen se oscurece, mejor irse antes de perder completamente su fe.

Anónimo dijo...

Ahora comprendo por que te llaman “rebel girl” :-)
Pienso que son conceptos diferentes. Fe, es una cosa, religión otra y espiritualidad algo diferente, mas personal e intima en cada uno de nosotros.
La forma, como y con quien cada ser humano decide vivir, desarrollar y experimentar su “persona espiritual”, es decisión y trabajo ( por que si que lo es, un trabajo y serio) de cada uno.

Rebel Girl dijo...

Soy "Rebel Girl" y distinta del Padre Hoyos. Le admiro mucho y por eso ayudo con este blog pero no coincidimos en todo, especialmente en la politica y en cuestiones de la burocracia de la Iglesia Catolica. La cosa de "querer" creo que es algo cultural. En mi cultura Anglo se reserva esta palabra para hablar de relaciones mas intimas -- romanticas o con la familia. Tuve que acostumbrarme al uso/sentido mas amplio que le da el Padre Hoyos a esta palabra.

Este articulo toco un nervio (touched a nerve, as we say in English) porque estoy cambiando de parroquia por muchas cosas que sucedieron que me lastimaron profundamente y por las cuales perdi el respeto por la jerarquia de nuestra Iglesia Catolica. Creo que unos piensen que estoy huyendo y quizas tienen la razon pero fue necesario.

Anónimo dijo...

Te comprendo bien. Yo no soy el mejor ni más disciplinado de los católicos, tengo muchos defectos y dudas, pero este es el carisma del Padre Hoyos, el de proyectar una humanidad, amor y espiritualidad que viene directamente desde su corazón y que en cierta manera trasciende las formas y normativas de la iglesia que representa y como es lógico, defiende.
Deja que te cuente que tengo una amiga en Miami que asistía a una iglesia Luterana cuyo pastor es un amigo nuestro. Se marchó fastidiada por las políticas internas, envidias y manipulaciones que se llevaron a cabo contra este pastor y a favor de otras personas. Como decimos en España: “En todas partes cuecen habas”.
Espero que encuentres la paz y comunidad que buscas. Todos somos parte de la Iglesia de Cristo, pero no se pueden ignorar los conflictos y dilemas personales.

Nota a parte: Nosotros asistimos a Holly Family en Woodbridge, Va. El Padre Hoyos dejo un gran legado en la comunidad hispana aquí en esta zona.

Anónimo dijo...

Es nuestro deber como Cristianos Católicos de cuidar a nuestros sacerdotes ya que cada uno de nosotros somos su familia. Muchas veces ellos despues que finalizan su dia el domingo despues de celebrar tantas misas, se quedan en sus parroquias solos. Cuantos de nosotros somos capaces de invitarlos a un almuerzo o talvez a una cena para que sientan el calor y el cariño que cada uno de nosotros les tenemos.
No necesitamos de mudarnos de parroquia e irnos donde nos sintamos bien. Si la Fé es solamente sentirse bien, entonces cuando tengamos alguna enfermedad ó problemas ¿nos vamos a lejar de Dios?, la Fe no es un sentir, es un vivir cada día el amor que Dios me dá en ese amanecer, el solo estar vivos y poder admirar su belleza y que el corazón te palpite de alegría, eso es Fe porque le estás siendo agradecido al creador.
Mi querida Rebel Girl, creo que necesitas ir al principio de tu conversión y sentir el amor de Cristo en tu corazón

Mercedes