Por José Eugenio Hoyos.
Las jornadas de Sanación, Fe y Alabanza realizadas recientemente en la preciosa ciudad de Chajarí en la Provincia de Entre Ríos se convirtieron definitivamente en un gran festival de la Fe.
Me emocionó mucho ver la cantidad de niños y jóvenes dándole ritmo y apoyando las Alabanzas en este gran evento. El Padre Jorge Charreun y demás organizadores se merecen una sincera felicitación y una gran lluvia de aplausos por incluir y tener en cuenta a los niños y jóvenes y más ahora en que la juventud y la niñez juegan un papel importante en la Fe. Al incluirlos en estas jornadas de Sanación y Fe es proyectarlos a un modo Espiritual que traerá en sus vidas excelentes resultados y grandes frutos.
En cada Alabanza estos niños y jóvenes le inyectaron al evento, alegría, gozo y mucha vida hasta llegar a contagiar a los más duros de Corazón.
Los niños vestidos con color verde quedaron Bautizados como “las vitaminas Espirituales” su color proyectaba semilla de esperanza y energía Celestial.
“Las proteínas Espirituales” vestían de rojo representando la alegría, el gozo y la fuerza del Espíritu Santo. Con su liderazgo prendieron los motores del entusiasmo a todos los que respondieron positivamente a las jornadas de Evangelización convocadas por la Parroquia María Auxiliadora de Chajarí.
Con el ritmo pegajoso del chucu chucu se prendió la gran fiesta y a un lado quedaron las altas temperaturas que bronceaban y quemaban en la sociedad rural de dicho lugar.
Todos los asistentes sentíamos la alegría y la felicidad de movernos al escuchar la melodía del chucu chucu: “Ven no te quedes afuera y tómale la mano a tu hermano con este ritmo loco y con amor alabemos a Dios. Levanta los brazos y mueve la cabeza y tu cintura salta de lado a lado y sigue el ritmo para alabar a Dios”.
Prepárate desde ahora que para el próximo año habrá mucho chucu chucu Carismático Espiritual. Pues estaremos ¡Bendecidos, encendidos, Sanados y en Victoria!
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