viernes, febrero 27, 2009

La naturaleza puede traer paz interior

Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Hablamos, discutimos, asistimos a conferencias y foros para encontrar soluciones a conflictos armados, a la guerra y las consecuencias que trae la postguerra, al terrorismo, violencia entera pandillas etc., pero poco hablamos sobre nuestra propia paz. “La paz de Dios, que supera todo entendimiento, guardará vuestro corazón y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” (Filipenses 4:7).

Paz hemos dicho muchísimas veces es un derecho que Dios nos ha regalado pero el hombre por su dureza de corazón lo ha malentendido, desechado y olvidado. La paz no significa que las personas tienen que ir a un lugar aislado y sin ruido, o ir a meditar en un bosque, o al lado de un arroyo de fuentes de agua saltarinas, sin experimentar las preocupaciones del diario vivir, sin trabajar etc. Una paz saludable es la que forjamos en medio de problemas turbulentos inyectándole el mejor ingrediente como es la prudencia, la calma y la paciencia. Tratemos de sentir cada día esa paz interna que todos llevamos dentro del corazón y que esta en proceso de gestación, ella nos hará sentir en armonía con nosotros mismos y con el universo.

Es bueno recordar que en occidente casi no utilizamos el hemisferio cerebra derecho. Es el hemisferio de la intuición, la creatividad, la imaginación, la fantasía y la interiorización. Por eso nos emocionamos tanto al reducir nuestra vida al campo de lo racional, el cálculo y los análisis. Nos conviene crear espacios de silencio relájate y da soledad creativa y meditaba.

No es fácil en un mundo de tanto acelere y tan consumista, pero cada día son más los que se cultivan espiritualmente. Si tú te amas un poco, dejas de vivir en función del dinero o el poder y pones la paz interior como una prioridad. Tomas la decisión de quererte, de cuidar tu alma, de dedicar tiempo a tus seres queridos y de no ser esclavo de lo material. Te regalas espacios de silencio y relajación y poco a poco llenas tu vida de calma. Si quieres una tranquilidad relajante trae a tu mente un paisaje favorito, un mar reluciente con un sol brillante, unas cascadas, un jardín lleno de flores, o niños jugando en el parque. De todas formas si eres feliz, traerás paz. Disfruta la naturaleza con solo mirarla trae paz.

Foto: El conocido monje norteamericano Thomas Merton buscaba a Dios en la naturaleza.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Why am I looking for new updates to this blog at 3,45 am? None updades blogs at this hour...or perhaps, just me.